Los cinco principales desafíos de España en cuestión de migraciones y asilo

Actualidade
22 Xaneiro 2021

"La crisis sanitaria, económica y social provocada por la covid-19 ha provocado un deterioro progresivo de las condiciones de vida de la población migrante en España. Este 2021 va a ser un año clave en política migratoria."

Nuestro país encara este 2021 con múltiples desafíos superpuestos en materia de política migratoria y de asilo. Estas reformas estarán entre las tareas más delicadas del Gobierno de coalición, dada la complejidad y repercusión de los asuntos, pero también por las posturas tan dispares que ya se han puesto de manifiesto entre ambas formaciones.

Las propuestas de reforma que el Ministro de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, José Luis Escrivá, hacía en febrero 2020, no han podido llevarse a cabo por la falta de consenso entre las distintas fuerzas políticas y por la llegada de la pandemia de la covid-19, que ha cambiado el orden de las prioridades y ha forzado a desarrollar distintas acciones no previstas (instrucciones, prórrogas, nuevas medidas, planes de acogida) para dar respuesta a la crisis sanitaria, económica y social provocada por el virus.

Escrivá y la Secretaria de Estado de Migraciones, Hana Jalloul Muro, han renovado casi por completo el organigrama de la anterior Secretaría de Estado, han tenido que resolver distintas situaciones de forma muy rápida y pocas de las medidas que plantearon inicialmente se han implementado.

Esta situación está adquiriendo características muy singulares en relación con la población migrante, que sufre un deterioro progresivo como lo muestran los indicadores sociales relativos al desempleo, la carencia material o el nivel medio de renta.

Por ello, este 2021 será un año clave en política migratoria ante los desafíos que se presentan:

  1. La reforma de la LOEX, la Ley de Extranjería, y su reglamento.

El reto será que la reforma brinde una respuesta más adecuada y real a la realidad migratoria. Algunos de los puntos más importantes que se han anunciado: modificación del catálogo de ocupaciones de difícil cobertura; simplificar los procedimientos para adaptar los flujos migratorios a las necesidades del mercado laboral; homogeneizar las autorizaciones de residencia. Así mismo, adecuar a la actual realidad migratoria los modelos de detención e internamiento, y en especial en los Centros de Internamiento de Extranjeros (CIES) y las devoluciones sumarias en el contexto de frontera.

  1. La Ley de Asilo y su reglamento.

Actualmente, el sistema de acogida de refugiados y solicitantes de asilo se encuentra colapsado; por ello es necesario reforzarlo. Pero también descentralizarlo siguiendo la sentencia del Tribunal Superior de Justicia de Madrid (STSJ M 369/2018), que establece una transferencia competencial a las Comunidades Autónomas. Además, habrá que redefinir el papel que jugarán las entidades sociales en el nuevo modelo, de qué forma los Programas de Patrocinio Comunitario vendrán a complementar el sistema estatal de acogida, el papel de la sociedad civil y las comunidades locales, y si el Estado, como anunciaba el Ministro Escrivá, tendrá una mayor implicación. Otra de las claves será la dotación de ayudas a los solicitantes de asilo que pretende ser más selectiva.

  1. Estrategia de Convivencia Intercultural.

España lleva más de seis años sin una estrategia de convivencia intercultural o de integración para las personas de origen inmigrante. En este sentido, la actual situación social y económica urge a intensificar iniciativas normativas estatales, autonómicas o provinciales de convivencia intercultural. Solo cinco Comunidades Autónomas cuentan con planes autonómicos vigentes de convivencia intercultural o integración.

Igualmente, el Gobierno deberá restituir el Fondo para la Integración, Acogida y Refuerzo Educativo de los Inmigrantes, para dotar de los necesarios medios económicos a los municipios y autonomías en el desarrollo de sus planes.

  1. El tema de la irregularidad.

La evolución de la inmigración irregular en nuestro país sigue una tendencia creciente. Destacar la elevada incidencia de la irregularidad sobrevenida, que llegan fundamentalmente vía: solicitantes de protección internacional que ven denegada su solicitud; personas que no pueden mantener un empleo; y jóvenes ex tutelados que con la mayoría de edad quedan desamparados. En concreto, la covid-19 está suponiendo un profundo deterioro económico y personal en las personas y familias migrantes que se encuentran en situación irregular en nuestro país, tal y como señalan trabajos recientes de investigación. En el próximo año volveremos a escuchar con fuerza voces desde el propio Gobierno de coalición, organizaciones sociales y ayuntamientos, para regularizar a estas personas (se estima que rondaría entre 500.000 y 600.000 personas) en nuestro país.

  1. La transposición de las reformas políticas de migración y asilo de la UE.

Desarrollar una política migratoria y de asilo común será de las tareas más difíciles que la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, tenga por delante para este año. El reto será vencer la inercia de fronteras y seguridad, institucionalizada en el seno de la UE con la externalización de las fronteras, poniendo en marcha medidas y actuaciones orientadas hacia la integración de la mano del recién aprobado nuevo "Pacto sobre el asilo y la migración". A este respecto, el Parlamento Europeo y el Consejo este año irán adoptando toda la legislación necesaria para hacer realidad esa auténtica política común de asilo y migración de la UE. En el horizonte está el "Plan de acción global sobre integración e inclusión para el período 2021-2027", que pretende ser un impulso para la inclusión de todas las personas, reconociendo la importante contribución de los migrantes a la UE y haciendo frente a las barreras que pueden obstaculizar su participación en nuestra sociedad.

Fuentes: El País, S.Barciela, A.Ares

(*) Sergio Barciela es Doctor en Migraciones Internacionales y Cooperación al Desarrollo e investigador del Instituto de Migraciones (IUEM) en la Universidad Pontificia Comillas.

(*) Alberto Ares es Doctor en Migraciones Internacionales y Cooperación al Desarrollo y Director del Instituto de Migraciones (IUEM) en la Universidad Pontificia Comillas.